Andrómaca
(Ανδρομάχη)

4 de abril de 2005

Niños, niños y más niños!!

El sábado fuimos al 1º cumpleaños de María Celina, la hija de un amigo de Chris.

Reunión típica con la participación de la familia y amigos. Niños correteando por todos lados.

También conocimos a Renata, la beba de 3 meses de otro amigo de Chris.

El grupo de amigos es siempre el mismo, la única diferencia es que ¡¡cada vez hay más hijos dando vueltas!!!

Lo que es extraño es que salvo por el Bocha, que tiene 2 varones más grandecitos, todos los demás tienen nenas... ¿será entonces como dicen que todo depende de la posición?

¿Y a qué viene todo esto? Bueno, muy simple. Si antes me sentía medio "perdida" entre el grupo de mujeres, ¡¡ahora mucho más!!
Antes estaba como "out" porque recién empezaba mi noviazgo, estaba terminando el colegio/empezando la facultad/terminando la facultad; pero ellas estaban ya casadas u organizando el casamiento... o sea que muuucha intervención por mi parte no se podía esperar.
Ahora la cosa está más nivelada, pero claro, ya están todos corriendo atrás de los hijos.

El sábado estaban todos: "¿Y...? ¿Ustedes para cuándo?" "Es lo más hermoso del mundo" "Un hijo te cambia la vida" "Olvidate de tener vida" "¿Dormir hasta tarde? ¿Qué es eso?", etc. etc. etc.

Ahora, aclaremos los tantos.
Yo sí quiero tener hijos, pero no todavía. Los que me conocen... ¿realmente me ven como madre ahora?

Todavía siento que tengo mucho por hacer: quiero tener tiempo para trabajar y seguir con todas las actividades que tengo ahora; quiero hacer cursos, seminarios, todo lo que implica mi formación profesional; quiero seguir teniendo a mi "marinovio" para mí sola; quiero poder juntar plata y viajar de nuevo a Europa con la mochila, gastarme los pies caminando las ciudades y traer 20 rollos de fotos para revelar; quiero poder seguir yéndome de vacaciones en marzo; quiero terminar de armarme la casa; quiero ver qué posibilidades hay de mudarnos a un lugar más grande...

Tal vez mis argumentos no sean lo suficientemente válidos para algunos, pero para mí sí lo son y eso es lo que importa.
Preparado para ser padre no se está nunca, eso lo tengo bien claro, pero es una decisión muy importante que se tiene que tomar de a dos, cuando los dos veamos que las cosas están marchando como queremos y progresan en la dirección que queremos.

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